Una máscara que se fusiona en una sola fórmula con un conjunto de activos altamente desintoxicantes: carbón activado, arcillas (bentonita y caolín), y sauce blanco (ácido salicílico). Esta máscara limpia en profundidad los poros, absorbe el exceso de grasa e impurezas, elimina toxinas y realiza una pequeña exfoliación, devolviendo así la luminosidad a la piel. Contiene ácido hialurónico y aceite de chía orgánico que se encargan de hidratar la piel en profundidad dejándola firme y radiante. Sirve para todo tipo de piel, incluyendo las pieles sensibles, maduras, grasosas, con acné y rosácea.